domingo, 26 de octubre de 2014

Un "Da Vinci" feminista

“La última cena” de Leonardo Da Vinci se ha convertido en los últimos años un referente de inspiración tanto para escritores buscando los secretos que alberga el cuadro como para la publicidad.

Este cuadro es considerado por muchos historiadores como la mejor obra de arte del mundo, se cuenta que Da Vinci se mantuvo sin descanso olvidando comer y dormir para contemplar la evolución de su obra.

Fue en 2005 cuando una campaña de ropa francesa Marithé and François, generó polémica en los círculos religiosos. La escena, obra  de la fotógrafa Brigitte Niedermair, reproduce “La última cena” con mujeres en lugar de hombres. El hecho de que una de las apóstoles esté abrazando el torso desnudo de un hombre aumenta la ofensa de imitación, al igual que el uso de símbolos cristianos como la paloma o la vestimenta y el pelo de la modelo que caracteriza a Jesús.

Esto hizo que primero en Italia y después en Francia la campaña fuera retirada de las calles y los carteles, en España no hizo falta, ya que la marca no realiza un gasto significativo en publicidad, pero pudo exhibirse en las páginas de revistas de primera línea.


El trabajo de la fotógrafa expone una visión alternativa del mundo. Asegura que si las protagonistas de esa cena hubieran sido mujeres, el mundo no estaría donde está. Por otra parte, la empresa dice que su “Última cena” escenifica una nueva feminidad invirtiendo la idea de Da Vinci, invitando a un hombre a la cena. La mujer deja de ser el objeto de imaginación masculina y se muestra como protagonista de la obra de arte.


1 comentario:

  1. Estas cosas de la censura que no termino de ver. Bien por tu entrada y elección.

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